El alto consumo de sal aumenta el riesgo de la ateroesclerosis en personas sin hipertensión: Estudio
El estudio relacionado a la sal incluyó a más de 10 mil individuos de entre 50 y 64 años de edad.
La sal se debe consumir con moderación. | Foto de Castorly en Pexels.
Un estudio sueco concluyó que la sal juega un factor clave y de mucho riesgo en la aparición de la ateroesclerosis. Lo más preocupante es que puede afectar a personas que no tienen hipertensión.
El portal Medscape mostró una amplia relación entre el consumo de sal en la dieta y el riesgo de lesiones ateroescleróticas en las arterias coronarias y carótidas.
Esto se dio en participantes con presión arterial normal y sin enfermedad cardiovascular documentada. Los resultados fueron publicados en versión electrónica el 30 de marzo en European Heart Journal Open.
El análisis fue realizado en 10 mil 788 adultos de edades con edades entre 50 y los 64 años. Fueron sometidos a una angiografía coronaria por tomografía computarizada. Usaron la excreción de sodio estimada en 24 horas para medir la ingesta de sodio.
Tras el ajuste por edad, sexo y lugar de estudio, se descubrió que el aumento del consumo de sal se relaciona de forma lineal con el aumento de la ateroesclerosis tanto en las arterias coronarias como en las carótidas.
LA ATEROESCLEROSIS, ¿QUÉ ES? LO QUE SE REFIERE EL ESTUDIO DE LA SAL
Cuando alguien tiene ateroeclerosis los vasos sanguíneos que llevan el oxígeno y los nutrientes del corazón al resto del organismo (arterias) se engrosan y endurecen.
Esto, según Mayo Clinic, restringe el flujo sanguíneo a órganos y tejidos. Las paredes de las arterias con el tiempo se pueden endurecer.
Se va dando cuando hay acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias dentro de las arterias y paredes. La placa de grasa puede provocar el estrechamiento de las arterias y el bloqueo del flujo sanguíneo.
Esta afección se puede tratar, y los hábitos de un estilo de vida saludable pueden ayudar a prevenirla.
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