Estudio revela que fumar es aún más nocivo para la salud del corazón de lo que se pensaba
El tabaquismo puede hacer tu corazón más grueso, pesado y provocando una dificultad para bombear sangre
Cada año, más de 8 millones de personas fallecen a causa del tabaco, segun lo indica la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se considera que el tabaquismo es el responsable del 50% de todas las muertes evitables de los fumadores, la mitad de ellas se deben a enfermedades cardiovasculares ateroscleróticas como el infarto de miocardio y el ictus.
Investigaciones constatan que el tabaquismo se asocia a un mayor riesgo de insuficiencia cardiaca. El músculo cardíaco no bombea la sangre por el cuerpo tan bien como debería, normalmente porque es demasiado débil o rígido, debido a que el cuerpo no recibe el oxigeno y nutrientes que necesita.
Cuanto más se fuma, peor es el funcionamiento del corazón. El corazón puede recuperarse hasta cierto punto si se deja de fumar, así que nunca es demasiado tarde para dejarlo”, explico la autora del estudio, la doctora Eva Holt, del Hospital Herlev y Gentofte de Copenhague (Dinamarca).
Corazón más grueso, débil y pesado
El estudio fue basado en datos del 5º Estudio del Corazón de la Ciudad de Copenhague, que investigó los factores de riesgo y las enfermedades cardiovasculares en la población general. Fueron alrededor de 3,874 participantes de entre 20 y 99 años de edad sin enfermedades cardíacas.
Se sometieron a una ecocardiografía, que proporciona información sobre su estructura y su funcionamiento. La edad media de los involucrados era de 56 años y el 43% eran mujeres. uno de cada cinco participantes era fumador actual (18,6%), mientras que el 40,9% era exfumador y el 40,5% no había fumado nunca.
Las conclusiones arrorajon que el tabaquismo actual se asocia a un empeoramiento de la estructura y la función de la cavidad cardíaca izquierda, la parte más importante del corazón. Además, que, en un periodo de 10 años, los que seguían fumando desarrollaban corazones más gruesos, pesados y débiles que eran menos capaces de bombear sangre.
Nuestro estudio indica que el tabaquismo no sólo daña los vasos sanguíneos, sino que también perjudica directamente al corazón. La buena noticia es que algunos de los daños son reversibles al dejar de fumar”, concluyó Holt.
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