Sexo: ¡Atención! tu juguete sexual podría revelar datos a ciberdelincuentes

Los fabricantes de estos aparatos, usados durante el sexo o simplemente un momento contigo mismo, suelen dar prioridad a su funcionalidad, aspecto y coste, pero no prestan atención a la seguridad informática del dispositivo.

Por eso los juguetes sexuales están en el punto de mira de los ciberdelincuentes y pueden ser vulnerables por la información tan íntima y sensible, sobre todo por el tema del llamado "internet de las cosas".

Muchos se encuentran fabricados en países en los que no se atienden las mismas normas de seguridad y de privacidad que hay en Europa y pueden llegar a almacenar datos como  hábitos, lugares, horarios, imágenes e incluso conversaciones.

Riesgos del internet de las cosas en el sexo

Uno de los principales problemas de esto es la vulnerabilidad de la seguridad y que los dispositivos quedan expuestos a accesos que no están autorizados.

La ingeniera informática Ángela García Valdés, especialista en tecnologías de seguridad y técnico del Instituto Nacional de Ciberseguridad español (INCIBE), precisó que todos estos dispositivos almacenan mucha información. 

Por eso es importante configurar de forma correcta la conexión y crear una red separada para ese tipo de dispositivos, conectarlos cuando nada más se estén usando, colocar  contraseñas "seguras e independientes", deshabilitar los protocolos que hacen que varios dispositivos se encuentren y eliminar de forma periódica el historial.

"Cuanta más información concreta tengan sobre nosotros, más verosímiles parecerán estos ataques y, por tanto, el porcentaje de éxito será mayor".

Ha citado por ejemplo campañas de "sextorsión", que siginifica chantajear a una persona con una imagen o vídeo con contenido de sexo. 

Recomendaciones para evitar volverte una víctima

Lo que exhortan a aplicar si utilizas este tipo de juguetes para el sexo o para complacerte por sí solo es: 

• Contraseñas únicas y robustas.
•  No utilizar nunca redes wifi públicas.
•  Protección de los datos.
• No compartir nada que pudiera ser sensible o hacer daño si se expone públicamente.

La empresa de  ciberseguridad Kaspersky han observado que algunos vibradores se conectan por "bluetooth" a teléfonos móviles o tabletas y permiten el uso local o remoto. 

Entre las funciones de la aplicación figuran, hasta una red social completa con chat de grupo e incluso álbumes.

Un investigador hizo un experimento con uno de estos dispositivos y en la carpeta de configuración del mismo encontró un archivo y consiguió conectarse a una base de datos y acceder a los datos privados de todos sus usuarios, incluyendo nombres, contraseñas, chats o imágenes.