Osteoporosis: Toser fuerte o una leve tensión podría volverte vulnerable a fracturas
La osteoporosis no solo es algo de mujeres sino que los hombres también se pueden ver afectados.
Cuando alguien tiene osteoporosis, los huesos pueden debilitarse y volverse muy quebradizos, así que cualquier movimiento o hasta el simple hecho de toser fuerte puede ocasionarte una fractura.
Las fracturas relacionadas con la osteoporosis ocurren con mayor frecuencia en la cadera, la muñeca o la columna vertebral.
Por eso algunos medicamentos, dieta saludable y ejercicios con pesas pueden ayudar a prevenir la pérdida ósea o a fortalecer los huesos débiles. Cuando se pierde masa ósea en las etapas iniciales quizás la persona no presente síntomas.
Una vez que la osteoporosis debilita los huesos, podrías tener signos y síntomas que incluyen los siguientes:
- Dolor de espalda, provocado por una vértebra fracturada o aplastada
- Pérdida de estatura con el tiempo
- Una postura encorvada
- Un hueso que se rompe mucho más fácilmente de lo esperado
Osteoporosis y las probabilidades de desarrollarla
Cuando estás joven tu masa ósea está en buen nivel, sin embargo después de los 20 años el proceso se vuelve lento y la mayoría de las personas alcanzan su masa al máximo a los 30 años.
A medida que las personas envejecen, la masa ósea se pierde más rápido de lo que se crea.
La masa ósea máxima es en parte hereditaria y también varía según el grupo étnico. Cuanto mayor sea la densidad ósea máxima que adquieras, más tejido óseo tendrás "en la reserva" y menor será la probabilidad de padecer osteoporosis cuando envejezcas.
Es importante buscar la manera de prevenir la descalcificación si en tu caso no tiende a ser algo hereditario. Por eso la buena nutrición y el ejercicio regular son esenciales para mantener los huesos sanos durante toda la vida.
Los hombres y mujeres que tienen entre 18 y 50 años necesitan 0,03 onzas (1000 miligramos) de calcio al día. Esta cantidad diaria aumenta a 1200 miligramos cuando las mujeres cumplen los 50 años y los hombres, los 70.
Las buenas fuentes de calcio incluyen las siguientes:
- Productos lácteos bajos en grasa
- Vegetales de hoja verde oscuro
- Salmón enlatado o sardinas con espinas
- Productos de soja, como el tofu
- Cereales fortificados con calcio y jugo de naranja
- Los ejercicios pueden beneficiar tus huesos sin importar cuándo comiences a hacerlos, pero lo mejor será si comienzas a ejercitarte regularmente de joven y continúas haciéndolo durante toda la vida.