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Alimentación

¿Es necesario cortar y frotar los extremos del pepino para evitar un sabor amargo?

Cortar y frotar los extremos del pepino es una práctica común en muchas cocinas mexicanas.

Por Kimberly Salazar

Con su refrescante sabor y textura crujiente, el pepino es una de los vegetales más presentes en la cocina(Alena Darmel/PEXELS)

Con su refrescante sabor y textura crujiente, el pepino es una de los vegetales más presentes en la cocina | Alena Darmel/PEXELS

El pepino es uno de los vegetales que no debe de faltar en la cocina, pues con su refrescante sabor y deliciosa textura se pueden preparar desde ensaladas hasta bebidas, pasando por platillos principales y aperitivos.

De acuerdo con la Secretaría de Salud de México, el pepino es una hortaliza con grandes nutrientes y de bajo aporte calórico debido a su reducido contenido en hidratos de carbono, en comparación con otras hortalizas, y a su elevado contenido de agua.

No obstante, como en todos los alimentos, el pepino también esta rodeado del algunos mitos y creencias como por ejemplo: cortar y frotar los extremos del pepino antes de consumirlo. 

 

Algunas personas prefieren cortar los extremos del pepino por razones estéticas o para eliminar cualquier parte que parezca dañada  FOTO:Louis Hansel/UNSPLASH 
Algunas personas prefieren cortar los extremos del pepino por razones estéticas o para eliminar cualquier parte que parezca dañada  FOTO:Louis Hansel/UNSPLASH 

¿Cortas los extremos del pepino o no?

Gustavo González Aguilar, investigador del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), ha hablado sobre lo qué dice la ciencia respecto a uno de los mitos mayormente relacionados con el pepino.

Una de las creencias que ha pasado de generación en generación es que antes del consumo del pepino es indispensable cortar los extremos y frotarlos con las orillas del fruto con la intención de evitar que este tenga un sabor amargo.

Ante dicha creencia, el profesor del CIAD explicó que las plantas pertenecientes a la familia de las cucurbitáceas, como el melón, calabacita, sandía, calabaza y pepino, sintetizan metabolitos llamados cucurbitacinas (los responsables del sabor amargo). Estos funcionan como defensa contra plagas.

Por lo que al madurar los frutos, disminuye la concentración de cucurbitacinas; entonces, mientras se escoja un fruto maduro, la posibilidad de que este tenga un sabor amargo es menor. Lo que según Gonzáles Aguilar, no afecta el que se froten o no los extremos cortados del pepino para quitarle ese sabor amargo.
 

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