Estudio: Fumar aumenta el riesgo de un derrame cerebral hemorrágico poco común
Un estudio publicado en la revista Stroke de la American Heart Association se refirió al vínculo entre el tabaquismo y la hemorragia subaracnoidea o SAH.
Los fumadores empedernidos (más de 40 paquetes por año) tenían tres veces más probabilidades que los no fumadores. Las personas que tenían una predisposición genética a fumar tenían un 63% más de riesgo de tener una HSA.
Aquellas personas que fuman tienen un riesgo mayor a un sufrir un tipo de accidente cerebrovascular hemorrágico poco común. Esta investigación muestra que cuánto más se fume más riesgo correrá.
Es cuando un vaso sanguíneo en la superficie del cerebro se rompe y sangra en el espacio entre el cerebro y el cráneo y representa el 5% de todos los accidentes cerebrovasculares.
El mismo afecta principalmente a adultos de mediana edad; la mitad de las personas que padecen ACV tienen menos de 55 años. En días o semanas un tercio de las personas que los padecen fallece. Los que sobreviven tienen una alta tasa de discapacidad o deterioro cognitivo.
El doctor Guido Falcone, autor principal del estudio y profesor asistente de neurología en la Escuela de Medicina de Yale en New Haven, Connecticut, detalló que estudios anteriores han demostrado que fumar está asociado con mayores riesgos de HSA.
Sin embargo, no está claro si fumar u otra condición de confusión como la presión arterial alta fue la causa del accidente cerebrovascular".
El estudio analizó los datos de 408,609 personas en el Reino Unido en edades entre 40y 60 años. Identificaron a las personas del grupo que fumaban, junto con las que portaban genes asociados con la propensión a fumar y las que más tarde experimentaron accidentes cerebrovasculares de HSA.
Cuanto más fumaba mayor era su riesgo de tener una HSA. Aquellos que fumaban de medio paquete a 20 paquetes de cigarrillos anual por año tenían un riesgo 27% mayor que aquellos que no fumaban.
Los fumadores empedernidos (más de 40 paquetes por año) tenían tres veces más probabilidades que los no fumadores. Las personas que tenían una predisposición genética a fumar tenían un 63% más de riesgo de tener una HSA.
Los resultados deberían impulsar futuros estudios para explorar si las variantes genéticas que llevan al tabaquismo pueden usarse para identificar a las personas en riesgo de este tipo de accidente cerebrovascular, dijo en un comunicado de prensa el autor principal del estudio, el doctor Julian N. Acosta quien es neurólogo y becario de investigación postdoctoral en la Facultad de Medicina de Yale.
Con infomación de Heart.org
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