La trufa: Tres formas de usar su aceite en la cocina y diferenciar tus platillos
El aceite de trufa proviene de la trufa blanca o negra que es un hongo subterráneo que se encuentra en las raíces de árboles como el roble.
El aceite de trufa se considera uno de los productos más caros en la actualidad porque es un aceite terroso, picante y poderoso. Este es utiliza para agregar sabor a los platos. | Pixabay.
El aceite de trufa se considera uno de los productos más caros en la actualidad porque es un aceite terroso, picante y poderoso. Este es utiliza para agregar sabor a los platos.
El aceite de trufa negra tiene un sabor más terroso o a chocolate y el aceite de trufa blanca tiene un sabor a ajo. Este aceite se considera un producto gourmet y se utiliza en diferentes platillo.
Según Cook's Illustrated, el auténtico aceite de trufa se realiza añadiendo moléculas de sabor de aceite de trufa al aceite de oliva y pueden extraerse de fuentes orgánicas o recolectarse de trufas frescas.
¿Cómo puedes aprovecha el aceite de trufa?
Antes de explicarte como puedes aprovechar sus usos, las trufas no se cultivan ni cosechan fácilmente. Normalmente se usan perros o cerdos entrenados para encontrarlas.
Este aceite no se utiliza como tal para cocinar sino para el producto terminado. Funciona mejor en platos que contienen grasas como aceite de oliva, queso y crema. Algunas opciones en donde puedes aprovechar al máximo el aceite de trufa es:
- Adorne los huevos o la pasta con una cantidad pequeña de aceite de trufa.
- Al igual que el aceite de oliva, se puede usar como aceite para mojar el pan.
- Aumenta las salsas lácteas como bechamel y el puré de papas, polenta y el risotto con un chorrito de aceite de trufa.
Este aceite tiene un sabor fuerte por eso se debe utiliza con moderación. Para entrantes o aperitivos, una gotita es suficiente.
A continuación te compartimos una receta sencilla para que aproveches este aceite de trufa al máximo.
Carpaccio de calabacín con aguacate, tomate seco y trufa
Necesitarás:
- 1 Calabacín
- 1 aguacate
- Tiras de tomate seco
- Queso parmesano
- Aceite de trufa
- Semillas de sésamo tostado
Corta el calabacín en rodajas finas y trocea sobre él pedacitos de aguacate. Después agrega las tiras de tomate y decora con escamas de queso parmesano. Agrega semillas de sésamo tostado y aromatiza con el aceite de trufa.
Con información de Mercola y Manjares de la tierra.
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