Asma: Tipos y causas de esta limitante enfermedad
El 5 de mayo es el Día Mundial del Asma, una enfermedad crónica que afecta a niños y adultos y puede causar ausencia laboral.
El asma es incurable y sólo puede controlarse con tratamientos. | Pixabay
El 5 de mayo se celebra el Día Mundial del Asma, una enfermedad crónica inflamatoria de la vía aérea, potencialmente grave y que puede provocar ausencia laboral por ser limitante, además de causar la muerte en el “estatus asmático”.
El asma es una enfermedad que afecta a los niños, pero al ser incurable porque sólo se puede controlar, también la padecen los adultos, señala el doctor Luis M. Montaño, investigador de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Hasta cierta edad, las mujeres se ven más afectadas que los hombres por el asma, indica Montaño, responsable del Laboratorio de Investigación en Asma.
¿Qué hace el asma en el cuerpo?
Diversos factores exógenos detonan una contante hiperreactividad del músculo liso del aparato respiratorio, lo que produce cris asmáticas y broncoespasmo.
La inflamación por crisis asmáticas frecuentes genera el engrosamiento de las vías aéreas y por ende la diminución de su calibre, haciendo que se cierren con mayor facilidad y se dificulte la respiración.
Tipos de asma
Existen dos: El asma alérgica y la no alérgica.
La primera es conocida como inflamación tipo 2 e involucra a los linfocitos Th2, mientras que la segunda, como “no tipo 2” involucra a los linfocitos Th1.
De acuerdo con la UNAM, en ambos tipos, la intensidad de esta enfermedad se clasifica en leve, moderada o severa, siento esta última la menos frecuente.
En el asma alérgica existe un componente genético y los pacientes cursan con atopia, lo que implica un aumento en un anticuerpo llamado IGE que propicia que los asmáticos, sean susceptibles a ciertos factores exógenos detonantes y a otros no.
El asma alérgica, mediado por linfocitos Th2, causa una inflamación de la vía aérea a través de los eosinófilos, los basófilos, las células cebadas y los macrófagos. El asma no alérgica, que involucra a los linfocitos Th17, por lo general causa una inflamación neutrofílica con mucha producción de moco.
El asma alérgica, en sus tres modalidades (leve, moderada o severa) responde bien a los esteroides inhalados. Sin embargo, en el asma no-alérgica en su modalidad severa es de difícil tratamiento y es resistente a los esteroides.
Ambos tipos de asma son limitantes. La de tipo alérgico y no alérgico puede ser leve (empieza a faltar aire y aparecen problemas para mantener una conversación), moderada (ya no se puede hablar bien y tiene problemas para respirar) y severa (ya no pueden ni hablar).
Si no se atiende y controla apropiadamente, el asma severa puede llevar a la muerte por taponamiento de las vías áreas y exceso de secreción mucosa, advierte el doctor Montaño.
Asma por estrés y ejercicio
Además de medicamentos, contaminación ambiental (“las partículas PM 2.5 son las más terribles” y el ozono también causa inflamación), ácaros, polen (sobre todo en primavera), químicos industriales, bacterias, virus, excremento de cucarachas, pelo de mascotas y algunas comorbilidades como rinosinusitis, reflujo gastroesofágico, obesidad y diabetes complican el asma, el estrés y el ejercicio físico también pueden detonar episodios asmáticos.
El estrés detona una descarga colinérgica donde se libera un mediador químico que es la acetilcolina), y eso puede generar una crisis de asma.
El ejercicio también puede causar asma. En el caso de los deportistas, cuando empiezan a ejercitarse, entra aire frío a los pulmones, ocasionando cambios de osmoralidad y temperatura en las vías aéreas, que derivan en una crisis asmática.
Limitación inquietante
El asma es incurable pero se puede controlar con medicamentos.
Es importante que se atienda a tiempo, pues de lo contrario, la enfermedad avanza y empeora, la inflamación y la secreción de moco aumentan y remodelan la vía aérea.
La mortalidad por asma es baja, sin embargo, puede ocasionar ausentimos laboral, debido a la falta de aire y que impide caminar.
Esta condición puede estresar al paciente asmático y en algunos casos deprimirlo, señala el doctor Montaño.
El especialista de la UNAM recomienda a los pacientes asmáticos y a sus familiares, acudir al médico o neumólogo para recibir un diagnóstico preciso sobre el tipo de asma, así como un tratamiento adecuado.
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