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Sexualidad

¿Cómo afecta la obesidad a la sexualidad?

La obesidad es un factor de riesgo para numerosas enfermedades y también está relacionada con problemas de fertilidad. 

Mundo Sano

La obesidad también está asociada a problemas sexuales.(Archivo)

La obesidad también está asociada a problemas sexuales. | Archivo

Un problema de salud que está aumentado en todo el mundo es el del sobrepeso y la obesidad

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado que el sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo para numerosas enfermedades crónicas, entre las que se incluyen la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer.

Asimismo, estudios han demostrado que la obesidad también está relacionada con otras patologías somáticas y fisiológicas, como problemas de fertilidad, osteoartritis, problemas de sueño o el mal funcionamiento del sistema respiratorio, señala un artículo de la Universidad Veracruzana. 

En el caso de los problemas sexuales, estos se pueden observar tanto en hombres como en mujeres y pueden tener un origen psicosomático u orgánico como consecuencia de enfermedades derivadas de dicha obesidad. 

Estudios de casos de obesidad y disfunción sexual, señalan que estos aparecen especialmente en hombres con disfunción eréctil, esto se refiere a la inhabilidad de mantener la erección del pene para la actividad sexual. 

En el caso de la disfunción sexual femenina, los clínicos la estudian como un desorden en la excitación o deseo y puede estar relacionada con problemas genitales, disfunción sexual subjetiva o una combinación de ambos. 

Estudios epidemiológicos realizados en países de Europa y Estados Unidos, han mostrado evidencias de que personas con peso normal no sufren de problemas de erección. 

Sin embargo, el 41% de la población de hombres que ha sido estudiada y sufren sobrepeso, manifiesta una disfunción eréctil moderada o completa.

El estudio al que hace referencia la Universidad Veracruzana, ha hecho una comparación entre sujetos obesos y delgados, tomando en cuenta factores de sesgo como: Fumar, hacer ejercicio, consumo de alcohol, niveles elevados de colesterol, tener edad avanzada o tomar medicamentos antihipertensivos.

Los resultados revelan una asociación entre quienes sufren obesidad y el desarrollo de la disfunción eréctil. 

La evaluación de obesidad como factor de riesgo de enfermedades coronarias la relaciona significativamente con la disfunción eréctil, independientemente de la edad y del nivel de colesterol de la persona.

Adicionalmente, al ajustar los datos con la edad, se nota una tendencia lineal positiva entre el desarrollo de la disfunción eréctil y la falta de actividad sexual, mientras que la impotencia no se relaciona con el índice de masa corporal.

Otros resultados que se encontraron fueron:

  • Al disminuir masa corporal y aumentar la actividad física hay una relación positiva entre el mejoramiento de las funciones y la satisfacción sexual.
  • Mujeres que han bajado de peso reportan un aumento significativo de la percepción sexual y una mejoría de la satisfacción sexual.
  • Existe relación entre la obesidad y la dificultad para lograr un orgasmo, así como la falta o disminución en la frecuencia de las relaciones sexuales 
  •  El estrés, la depresión y la baja autoestima debida a la mala imagen que se tiene del cuerpo pueden afectar el deseo sexual en hombres y mujeres.
  • La reducción del peso corporal, sobre todo en las mujeres, implica un aumento del deseo y de la satisfacción sexual.


 

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