GA4 - Google Analitycs
Suscríbete
Suscríbete

Recibe todas las noticias
en tu e-mail

Enfermedades

"Paciente de Londres", un hombre curado de VIH, da esperanza tras 2 sentencias de muerte

Adam Castillejo, de 42 años, quiso compartir un mensaje de esperanza a la ciencia tras confirmarse el tercer caso de curación de VIH con el “paciente de Düsseldorf”. 

EFE

El paciente de Londres dijo que él se salvó del VIH y del cáncer.(Archivo)

El paciente de Londres dijo que él se salvó del VIH y del cáncer. | Archivo

Tras darse a conocer el tercer caso confirmado de curación de VIH en un hombre de Alemania, “el paciente de Londres” quiere compartir un mensaje de esperanza a la ciencia luego de haber sobrevivido a dos sentencias de muerte por el sida y la leucemia. 

Adam Castillejo, un británico de origen venezolano de 42 años, celebró en una entrevista con EFE que el “paciente de Düsseldorf se haya sumado formalmente a la lista de casos extraordinarios de curación del VIH que inauguró en 2011 el paciente de Berlín, Timothy Ray Brown, que falleció por cáncer en 2020.

Fue en ese mismo año que salió a la luz el paciente de Londres, el segundo del mundo que se presentó con nombre y apellido, para mostrar el lado humano de la investigación científica y ahora ha dicho:

Una prueba viva de los 40 años del desarrollo de la ciencia contra el VIH soy yo y no podía quedarme de incógnito, sino que tenía que salir para dar un mensaje de esperanza a los investigadores y a mi comunidad, porque, aunque ya no tengo el VIH, seré siempre de la comunidad VIH, como superviviente”.

 

  El paciente de Londres, un caso de curación de VIH y cáncer, quiere compartir un mensaje de esperanza a la ciencia. Foto: Archivo
  El paciente de Londres, un caso de curación de VIH y cáncer, quiere compartir un mensaje de esperanza a la ciencia. Foto: Archivo

20 AÑOS DE ODISEA, DOS “SENTENCIAS DE MUERTE” Y DISCRIMINACIÓN

En 2003, Castillejo recibió el diagnóstico de VIH, cuando el tratamiento antirretroviral no estaba tan avanzado como en la actualidad, y en 2012 llegó un segundo mazazo que, paradójicamente, fue el principio de una solución al sida, aunque repleta de complicaciones.

"En 2012 fui diagnosticado de un linfoma de Hodgkin en fase 4, muy agresivo, y en ese momento eso fue otra sentencia de muerte después de la primera de 2003 por el VIH, aunque esta vez fue diferente porque podía decirle a la gente que tenía cáncer y sentir el apoyo; con el VIH no pude porque la gente tiende a discriminar y estigmatizar", ha relatado el paciente de Londres.

El tratamiento inicial no funcionó adecuadamente y en 2015 los doctores le dieron la opción de un trasplante de médula ósea de un donante que, además, tenía una rara mutación, llamada CCR5 Delta32, que impide la entrada del virus en las células diana, con lo que podía curarse de ambas enfermedades.

EN REMISIÓN PERO A UN ALTO COSTO

El tratamiento funcionó y actualmente Castillejo, a sus 42 años, está en remisión de cáncer y de VIH, pero con un coste altísimo.

"Mi vida es como la que la gente vivió con el coronavirus, con aislamientos y mascarilla durante mucho tiempo, con además riesgos grandes de tener infecciones, complicaciones y posibilidad de un cáncer secundario", subrayó.

Los casos similares de los pacientes de Berlín, Londres y Düsseldorf ayudan a la ciencia a trabajar en métodos de curación del sida a gran escala a partir de la mutación CCR5 Delta32 que no sean mediante un trasplante de médula ósea -intervención de alto riesgo solo reservada para algunos enfermos de cáncer de sangre-, pero, a la espera de resultados, la prevención sigue siendo el mejor método.

"Hay una cultura de pensar que el sida ya pasó y no es así, prevalece vivo y latente en todos los rincones del planeta", ha enfatizado Castillejo sobre una enfermedad que en 40 años ha dejado 40 millones de muertos y que sigue matando anualmente, directa o indirectamente, a unas 700 mil personas en el mundo.

Afortunadamente, "en Europa hay medicamentos y algo más de educación, pero a la juventud -afirmó Castillejo- yo les digo 'cuídense, la salud es primordial y sin salud no tienes nada'".

Y en el caso de contraer el virus, lo importante es que la enfermedad no defina la vida del paciente y que se rompan los estigmas que todavía persisten.

"Aún pensamos que es una enfermedad homosexual de los años 80 y no es así, es importante que la gente entienda que no debe tener esas connotaciones y que es una enfermedad como cualquier otra, como la diabetes o el cáncer", concluyó el paciente de Londres.
 

En esta nota

Comentarios

Suscríbete

Recibe lo mejor de Mundo Sano en tu casilla de E-mail

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones