Esta es la enfermedad crónica que padece Ana Brenda Contreras que le causa inflamación
La actriz dijo que ha probado diferentes medicamentos y dietas.
Ana Brenda Contreras fue diagnosticada con una enfermedad crónica. | Instagram
Ana Brenda Contreras es una actriz nacida en Texas pero con raíces mexicanas que ha destacado por su talento. Incluso formó parte de un grupo musical llamado T' de Tila, el cual surgió del programa Popstars.
Y aunque la artista, que próximamente cumplirá 36 años, suele compartir parte de su vida en redes sociales, como Instagram y YouTube, hay un detalle que pocas personas conocen y se trata de una enfermedad crónica con la que ha tenido que aprender a vivir: Padece Síndrome del Intestino Irritable o IBS por sus siglas en inglés.
En una entrevista para Chic Magazine, Contreras detalló que desde hace varios años sufre de esta condición, la cual describió como "increíblemente complicada", le ocasiona inflamación que es muy notaria y por la que ha llegado a recibir comentarios de que está embarazada.
Ana Brenda también mencionó que es intolerante a muchas cosas, además de que el estrés o el cansancio agudizan su padecimiento.
Es un dolor espantoso como si te palpitara el estómago y te fuera a reventar. Y una inflamación horrible".
Como se trata de una enfermedad cuyas causas no son claras, la actriz ha buscado ayuda con múltiples especialistas para encontrar solución. También ha probado dietas y medicamentos pero señaló que se requiere de mayor investigación y estudios.
¿QUÉ ES EL SÍNDROME DEL INTESTINO IRRITABLE?
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, en inglés) explican que el Síndrome del Intestino Irritable es un grupo de síntomas que se presentan juntos, como dolor en el abdomen asociado con las evacuaciones y cambios en estas, como diarrea, estreñimiento o ambos.
Para tratar esta enfermedad los doctores recomiendan algunos cambios en la alimentación y el estilo de vida, así como medicinas, probióticos y terapias de salud mental para disminuir el estrés.
También es posible que se deban probar tratamientos para ver cuál brinda mejores resultados.
En el caso de la dieta, los cambios pueden incluir el consumo de más fibra, evitar los alimentos con gluten o seguir una dieta especial llamada baja en FODMAP.
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