Detectan el primer caso humano infectado por el hongo de una planta
El año pasado la OMS alertó sobre la posibilidad de que las infecciones fúngicas aumenten y puedan poner en riesgo la salud de la humanidad.
Médicos detectan el primer caso de enfermedad fúngica en un hombre de 61 años, mismo que manifestó síntomas similares a los de la gripe. | Medical Mycology Case Reports
Ha sido descubierto el primer caso humano que ha contraído una infección fúngica mortal para las plantas. El afectado es un hombre de 61 años, estuvo trabajando con material en descomposición, hongos y varios hongos vegetales durante mucho tiempo como parte de sus actividades.
Sin embargo, decidió acudir a recibir atención médica después de presentar varios síntomas similares a los de la gripe y dificultad para tragar durante tres meses. Los médicos se preocuparon cuando las pruebas iniciales no mostraron nada.
Entonces realizaron escáneres que mostraron que tenía un absceso en la tráquea. Ante ello, los especialistas drenaron el pus y enviaron muestras a un laboratorio, los resultados mostraron que tenía hoja de plata es una enfermedad fúngica de los árboles.
¿Qué es y cómo se transmite?
La hoja de plata es una enfermedad fúngica de los árboles causada por el hongo patógeno vegetal Chondrostereum purpureum . Ataca principalmente especies de la familia de las rosáceas.
Para ello, los científicos consideran que el paciente contrajo la enfermedad de la hoja de plata de chondrostereum purpureum mientras realizaba una investigación como micólogo de plantas.
Es importante destacar que apenas el años pasado la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que las infecciones fúngicas mortales están en aumento, lo que representa una amenaza para la humanidad.
Los síntomas que reveló la investigación fueron ronquera , tos, faringitis recurrente , fatiga, dificultad para tragar y anorexia durante los últimos tres meses y agregaron que las personas con un sistema inmunitario comprometido son más vulnerables a las infecciones fúngicas.
Por último, adjuntan que afortunadamente después de dos años de seguimiento, el paciente estaba absolutamente bien y no hay evidencia de recurrencia.
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