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Bienestar y Belleza

¿No te sientes atractiva? Descubre cómo afecta tener ideas negativas sobre ti misma

A veces la timidez proviene de un sentimiento de inferioridad debido a un defecto físico real o supuesto que produce inseguridad ante los demás y conviene afrontar para superarlo.

EFE

Cuando te miras al espejo, no siempre te agrada lo que refleja. Tu autoestima flaquea, y tu sensación de inseguridad aumenta.(Pixabay)

Cuando te miras al espejo, no siempre te agrada lo que refleja. Tu autoestima flaquea, y tu sensación de inseguridad aumenta. | Pixabay

Todas las situaciones en las que hay que relacionarse con otras personas pueden llegar a causar inseguridad y malestar si uno está a disgusto con su imagen.

Identificar las ideas que nos atemorizan, anticiparse a las situaciones que producen angustia y adquirir ciertas habilidades sociales, son los ingredientes claves para superar el retraimiento.

Hay que valorar las cualidades físicas positivas: Puede que uno tenga baja estatura pero posea una bonita conformación corporal. Quizá tenga unas manos feas pero una boca preciosa.

Desde el reto de presentarte a tí misma o asistir a una entrevista de trabajo, hasta las “pruebas de fuego” que suponen tomar contacto con una persona desconocida o hablar en público, todas las situaciones en que necesitas relacionarte con otras personas, pueden llegar a intimidarte si estás a disgusto con tu imagen.

De pronto sientes que te pones roja, te sudan y tiemblan las manos, se te quiebra la voz, tu estómago parece estar al revés y tu corazón se desboca. Te sientes mareada, parece como si todos se dieran cuenta de lo que ocurre, sientes que haces el ridículo.

Entonces comienzas a preguntarte qué pensarán de ti y te asaltan unas ganas imperiosas de esconderte. Te atemorizas y piensas en huir lo más rápido posible. Buena parte de la timidez que te atormenta en las situaciones sociales se debe a que no encuentras a gusto con tu cuerpo o alguna de sus partes o rasgos.

Cuando te miras al espejo, no siempre te agrada lo que refleja. Tu autoestima flaquea, y tu sensación de inseguridad aumenta.

Para evitar los problemas de timidez relacionados con la imagen corporal, lo mejor dicho la forma en que la percibes, afrontar las situaciones más difíciles o frecuentes que desencadenan tu malestar y aliviar la ansiedad que produce la fobia social hasta niveles manejables, basta con seguir los consejos de los expertos. 

Hay una serie de recomendaciones generales, que pueden servirte para afrontar cualquier tipo de reto ante los demás y decirle “¡adiós y hasta nunca!” a tu timidez.

Identificar las ideas que te atemorizan, anticiparte a las situaciones que te producen angustia, marcarte metas para ir superando la aprensión, y adquirir y practicar ciertas habilidades sociales, son los ingredientes claves para superar el retraimiento.

El más mínimo progreso en la tarea de derribar las ideas negativas que tienes sobre tí misma y descubrir que son infundadas, te permitirá “ganar muchos puntos” en materia de autoestima y seguridad, y te irá preparando para afrontar situaciones sociales cada vez más difíciles.

Estas son algunas estrategias sicológicas y recursos prácticos que realmente funcionan para superar el miedo a los demás, cuando te asalta la incómoda sensación de que eres fea: 

  • Circunscribe tu “anomalía” corporal con exactitud: Aunque tengas una nariz poco agraciada, el resto de tu cara seguramente no carecerá totalmente de atractivo.
  • Valora las cualidades físicas positivas: puede que seas baja de estatura pero tengas una bonita conformación corporal. Quizá tengas unas manos feas pero una boca preciosa. 
  • Aprovecha todos los trucos estéticos: conviene saber qué tipo de ropa, zapatos, adornos, peinados y maquillaje le van mejor a tu imagen, para superar el defecto. Asesórate con un experto
  • Compensa el aspecto “defectuoso” por otros: Por ejemplo, tu incapacidad para hacer deporte puedes compensarla con la afición a la música o a la lectura. 
  • Ten en cuenta que no todo es el físico: “lo que hay por fuera” es muchas veces muy poco importante comparado con “lo que hay por dentro”, es decir tu personalidad. 
  • Algunas deficiencias físicas son subsanables: la obesidad puede vencerse con esfuerzo y ayuda médica, y la medicina estética hoy consigue resultados prodigiosos.
  • Mírate de frente en el espejo. No hay que negar la evidencia del defecto y hacer como el avestruz, sino afrontarlo, buscar soluciones y ponerlas en marcha; incluso es bueno hablar de él.
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