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Bienestar y Belleza

7 señales de que llevas una dieta poco saludable

Otras señales, además del aumento de peso, pueden ser muestra de tener malos hábitos alimenticios. 

M. Alejandra González

Una mala alimentación no solo se refleja en el peso. El cuerpo puede demostrarlo con otras señales.(Unsplash)

Una mala alimentación no solo se refleja en el peso. El cuerpo puede demostrarlo con otras señales. | Unsplash

Seguir una mala alimentación no solo se ve reflejado en un peso poco saludable y en la medida de la cintura. Otros signos, que no aparecen de la noche a la mañana, pueden indicar que es necesario dar una revisión a tu dieta. 

Clínica Cleveland destaca que la evidencia científica ha encontrado que otras señales, además del aumento de peso, pueden ser muestra de tener malos hábitos alimenticios. 

Entre ellos detaca los siguientes:

  • Cabello reseco o quebradizo

Los órganos requieren una nutrición adecuada y balanceada para funcionar de manera adecuada y los folículos pilosos no son la excepción. Algunas dietas pueden conducir a una desnutrición proteico-energética severa que ocasionan cabello quebradizo o, pero aún, caída del cabello. 

Diversos estudios han mostrado que los planes alimenticios bajos en proteínas, ácidos grasos esenciales y nutrientes, como la vitamina C, el zinc y el hierro, tienen relación con la caída del cabello, su adelgazamiento y la pérdida de pigmentación. 

La recomendación de Clínica Cleveland para una malena saludable es incluir fuentes magras de proteínas, como huevo y salmón, muchos vegetales y frutas, además de semillas y nueces. 

Una mala alimentación se puede ver reflejada en la salud capilar. Foto: Unsplash

 

  • Envejecimiento prematuro de la piel

Es cierto que el envejecimiento es inevitable, sin embargo, tener una dieta nutritiva puede contribuir a la salud de la piel, además de retrasar los signos externos de la edad. 

Según análisis citados por Clínica Cleveland, una dieta rica en vitaminas A, C, D y E, además de antioxidantes y flavonoides clave, tiene efectos beneficiosos sobre la piel. Para obtener los beneficios y una apariencia más juvenil, lo ideal es consumir cinco o más porciones diarias de frutas y verduras.

  • Mala salud bucal

Tener las encías inflamadas, sangrantes o caries pueden ser signos de una mala alimentación. 

Las caries son causadas por demasiada azúcar, mientras que las encías hinchadas o sangrantes suelen asociarse con un déficit de vitamina C en la dieta.

Para aumentar el consumo de este nutriente, se recomienda incluir fresas, tomates, verduras de hoja verde y patatas. 

 

  • Tienes molestias digestivas

La diarrea y/o el estreñimiento pueden aparecer si no se consume suficiente fibra. Las cantidades diarias recomendadas son: 25 gramos para las mujeres y 38 para los hombres. 

Para aumentar la ingesta de fibra se pueden consumir más granos integrales como arroz integral, avena, nueces, semillas y frutas y verduras. 

  • Fatiga mental

Si se te dificulta concentrarte o tienes problemas de memoria, estos pueden ser una señal de que necesitas revisar tu dieta y cambiar tus hábitos por unos más saludables, pues el cerebro depende de una buena nutrición para rendir al máximo. 

Expertos de la Clínica Cleveland destacan que se necesita una ingesta adecuada de ácidos grasos omega-3 para un óptimo desarrollo cognitivo en todas las etapas de la vida. 

Para obtener suficientes omega-3 en la dieta, elige alimentos como nueces, semillas de lino, aceite de pescado y salmón salvaje.

El cerebro necesita los nutrientes esenciales para un óptimo funcionamiento. Foto: Unsplash

 

  • Heridas que no curan bien

Un pequeño corte, raspón o herida que no cura de manera rápida puede indicar una falta de nutrientes en el organismo. Las malas dietas pueden afectar la fuerza de los tejidos nuevos y hacer que el tiempo y eficacia de recuperación sea más lento. 

Estudios han demostrado que la ingesta suficiente de calorías, proteínas y nutrientes es esencial para la cicatrización adecuada de las heridas.

  • Enfermedades

Es bien sabido que el sistema inmunológico requiere de una dieta que le brinde los nutrientes necesarios para mantenerse fuerte y proteger al cuerpo de virus y bacterias que causan enfermedades e infecciones. 

Elige alimentos ricos en vitaminas A, C y E, zinc, selenio, hierro y ácido fólico. Comienza por aumentar la ingesta de frutas frescas, verduras y cereales integrales, específicamente frutas cítricas, verduras de hoja verde, palomitas de maíz (omita la mantequilla y la sal adicionales) y arroz integral.

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